Se colocan todos los niñ@s individualmente por el terreno de juego. Llevarán todos consigo algo facil de sujetar con la cabeza, como hojas grandes, pañuelos, ramas pequeñas, un folio doblado varias veces para que pese un poco más, un boligrafo... y que tendrán que mantenerla en equilibrio con la cabeza todo el tiempo que puedan. Mientras, tienen que seguir las ordenes del monitor, como no parar de andar, dar un salto, andar de espaldas, dar una vuelta y seguir caminando, etc (ojo, si estás en el exterior, el viento ya de por sí dificulta). Al que se le caiga, quedará congelado y tendrá que pedir ayuda a sus compañeros que tendrán que agacharse a por el objeto, y volverselo a poner al que se le había caido en la cabeza que podrá volver a moverse, sin que a ellos se les caiga la suya al ayudarles.
Al acabar, ya sea por tiempo o porque a todos se les ha caído el objeto se puede hablar de cuantas veces nos han ayudado o hemos ayudado nosotros.